En la plaza que lleva su mismo nombre, se encuentra enclavada la Iglesia de La Asunción de Nuestra Señora, justamente enfrente del edificio que albergó el primer Ayuntamiento de Villargordo y que en la actualidad se encuentra el Centro de Salud. La iglesia pertenece a la Diócesis de Jaén y al Arciprestazgo de Bailén-Mengíbar.
Poco se conoce de la historia del templo, ya que sus archivos fueron destruidos durante la Guerra Civil, al igual que sus imágenes y retablos, como así nos lo confirma un escrito firmado por el juez municipal el 21 de octubre de 1937 y que decía textualmente: “La situación del archivo judicial y del registro civil y municipal es altamente satisfactoria, sin quebranto de ninguna clases; no así en cuanto al registro parroquial, que desapareció totalmente a raíz del movimiento”. Si miramos en varios documentos sobre el pueblo de Villargordo, encontramos por ejemplo en el Catastro del Marqués de la Ensenada de 1752 la existencia de la parroquia con dos clérigos sacerdotes en que se incluía al Prior. En el diccionario Madoz, de 1845, nos habla de la iglesia parroquial (La Asunción de Nuestra Señora) de la que dependen las cortijadas de Almenara y Torrejón. Y por último, en el libro Atlante de 1926, nos dice que existía una iglesia parroquial en Villargordo, dedicada a Nuestra Señora de la Concepción con un cura párroco (como es lógico el nombre estaba equivocado).
De lo que si queda certeza es de la fecha del coro y sotocoro que se encuentra en la parroquia a los pies de nave central y que bien pudiera ser en un principio la capilla particular de la Casa de los Villadompardo y aunque estaba regida por clérigos costeados por los Señores de la casa Condal, esta iglesia perteneció a la Parroquia de la Magdalena hasta el año de 1893, donde adquiere rango propio de Parroquia independiente como así consta en el Obispado de Jaén.
Como he dicho con anterioridad, la fecha en que basamos su época es la propia inscripción que aparece en la viga central del sotocoro y que dice: “Esta obra y capilla y altar todo la iglesia se hizo siendo obispo de Jaén el muy ilustre y reverendísimo señor don Francisco Delgado y vicario el licenciado don Antón Minz Caraco y mayordomo Pedro Quesada Escribano público del Arzobispado, acabose año 1573”.
Dicha inscripción está realizada en una de las vigas del coro y da a entender que se realizó en dicho lugar ya que el retablo no estaba aún finalizado.
Precisamente las nuevas obras sobre el uso de los coros son aplicadas en esta obra, ya que se sitúa a la cabecera de la nave central de cara al retablo mayor, diferenciándose de los coros de algunos conventos que se sitúan en el lateral de la nave de la epístola. Encontramos dos balconadas diferentes, una era para el ejercicio de los rezos y el otro, separado, para el órgano aunque algunas veces servía dicho sotocoro para que los nobles asistieran desde dicho lugar a los actos religiosos. Es posible que antes de la guerra, el Cristo de la Veracruz estuviera situado en dicho sotocoro. El sotocoro está situado paralelamente a la nave central y en el lado de la epístola y se encontraba separado del coro por una puerta abatible con cornisa de madera.
El conjunto completo del coro se haya perpendicular a la nave central, apoyándose sobre la fachada principal y sobre una viga igualmente principal que atraviesa la nave y que descansa así mismo sobre una ampliación del muro, especialmente para que pudiera soportar el peso total de la obra en madera.
La obra se completaría con sillería sencilla que desapareció en el saqueo de la Guerra Civil en 1936, donde igualmente se destruye parte de la balaustrada y parece ser, que debido a las fogatas que se hacían bajos los coros, el artesonado se oscureció.
También desapareció el órgano situado en el sotocoro a finales del XIX y solamente queda el hueco que hubo de realizarse entre la pared y el techo para su instalación.
Otro elemento del cual sabemos su fecha es la pintura al óleo de Juan Almagro de la Capilla de las Ánimas, que fue realizado en 1943. Este pintor era de la localidad de Pegalajar y se dedicó a decorar y a pintar en las iglesias que en la contienda civil fueron saqueadas. Su pintura ocupa en la iglesia el mismo lugar en donde estaba la anterior. Este cuadro fue costeado por dos devotas cofrades cuyos nombres se pueden leer en una de las esquinas del lienzo.
El 10 de Marzo de 1941, el Ministerio de Gobernación a través de la Junta Nacional de Reconstrucción de Templos Parroquiales, dicta un decreto por el que conceden subvenciones para obras de arreglo de iglesias cuyos deterioros se hubieran producido por acciones de la guerra. El párroco de entonces, presentó un proyecto de reforma y ampliación siendo denegado en junio de 1954 argumentando que los daños que sufre la iglesia no estaban ocasionados por acciones bélicas con lo cual entendemos que aunque se perdieron los archivos, las imágenes y los objetos litúrgicos, el edificio no sufrió daño alguno.
El proyecto de reforma y ampliación, la realizó el arquitecto jiennense Enrique de Bonilla y Mir en 1954. Describimos el informe: “El edificio actual data en su construcción de bastantes años, teniendo zonas con señales evidentes de ruina. Al parecer la construcción primitiva era de solo una nave y posiblemente tenía ya capillas laterales junto a la cabecera, (como ocurre en la actualidad con el Baptisterio que se encuentra la izquierda de la entrada y cerrada con una puerta), y que luego se ampliaron con las dos que tiene a sus pies, en el lado del evangelio. Se remata la nave central por un ábside bastante más estrecho y cerrado por un retablo a la altura del arranque de la media circunferencia del nicho,(en la actualidad dicho nicho está ocupado por la imagen de la Asunción de Nuestra Señora y tapado en su totalidad por el retablo del Altar Mayor). A continuación está la sacristía y las dependencias parroquiales en estado de ruina. Rodeando el edificio, tiene la parroquia terreno de su propiedad que hace factible la ampliación de la misma. (La casa que se encuentra en la calle iglesia, junto al templo y que tiene las tejas de colores, es propia del templo y en el siglo XIX la casa del Prior).
En 1993 se realizan obras de consolidación del coro situando una estructura metálica pero que deja inservible el uso del sotocoro por la precaria situación de la solería.
Tiene la iglesia un retablo que data de 1917, que fue donado por el Hospital San Juan de Dios de Jaén en 1991.
La fachada principal es de mampostería y en uno de sus laterales está la torre de base cuadrada, con elementos neogóticos en su cuerpo superior como las dobles parejas de ventanas con arcos apuntados o los pequeños pináculos en sus esquinas.
Decir que conserva la portada renacentista con arco de medio punto con dovelas de sillerías y clave resaltada, sobre la que se sitúa una hornacina sin imagen. Dicha portada se encuentra en el lateral del actual templo. Como algo anecdótico diré que pude leer en un libro una descripción de dicha portada, y decía que había una hermosa puerta de madera que lucia un magnifico herraje labrado y adornado con una clavazón tan bonita que el propio escultor Mariano Benlliure se quedó admirado de aquellos clavos que, él mismo confesó, se hubiera llevado a su estudio de Madrid. Este escultor visitó Villargordo invitado por su buen amigo el Marqués de Mondéjar y fue el autor del monumento a Alfonso XII en el lago del Parque del Retiro. En la actualidad dicha puerta no existe y su vano ha sido tapado con una solería del Stmo. Cristo de la Salud.
Ya para finalizar diré que en el Archivo de la Catedral, encontré una pequeña acta firmada en 1671 en la que se daba fe de las cofradías por orden de primacía y que eran Cofradía de la Sta. Cruz llamada del Valle, Cofradía de la Sta. Veracruz, Cofradía de San Antón, sita en la capilla de Santa Ana, Cofradía del Dulce Nombre del Señor, Cofradía de los Siete Dolores de Nuestra Señora, Cofradía de la Pura y Limpia de la Virgen del Amor Hermoso y la Cofradía de las Ánimas benditas de la Virgen